Normalidad habemus.

Vaya una semana my friends…estrés, nervios, exámenes, demasiado para el body. Los que leísteis mi anterior post que sepáis que fue fruto de ese estrés y los que no lo hayáis hecho... ¡seguid sin hacerlo que es pésimo!

Bueno el caso es que después de largo tiempo por fin me he decidido a reemprender la vía del guerrero. No, nada de katanas y monos de plástico amarillo. Es algo mucho más light. Resulta que me he apuntado a Mugendo. Y la culpa es de Aletshe y de Allen Clown. Uno por contarme batallitas mugendiles y la otra por incitarme a tener las mías propias. Pero como resulta que disfruté como un enano en mi primera clase pues se les perdona.

Y es que esta arte marcial hecha a base de retazos de muy diversas disciplinas es dinámica y de sencillo aprendizaje. Luego ya el dominarla es otra cosa y eso es justo lo mejor de todo. Vamos que no paras ni te aburres en una sesión de entrenamiento. Lo curioso del Mugendo es que hace un par de años fue el arte marcial preferido de canis y elementos barriobajeros pero resulta que ya no queda casi ninguno. Y es que aunque no sea una arte marcial tradicional con su código y su ritual resulta que tiene unos valores base de superación personal y crecimiento emocional muy convenientes y necesarios en esta sociedad. Tendríais que ver lo que hacen con los niños. Toda una disciplina física y mental y casi sin que se den cuenta. Siendo el Sempai(es decir el instructor) todo un educador. Otro día con más tiempo y más entrenamiento os hablare de estos programas porque realmente me quede de piedra y fue un aliciente para decidirme por esa disciplina.

Ah, si. Por fin tengo el Google Wave. Es un poco complejo y esta en ingles (claro que a lo mejor se puede poner en castellano y no se como, que no es una opción a desechar) pero empiezo a verle el truco. Y es que al principio es un caos total. Ya lo veréis porque algo me dice que dejará de ser beta muy pronto. Porque recuerdo que al principio cuando eras invitado tardabas en recibir invitaciones y yo nada más llegar ya tenía 8. Así que si alguno quiere una… ¡Que deje un comentario! Que no se me olvide agradecer una vez más a Hidro por su invitación.

Y eso es todo. Como veis volver a entrenarme ha sido beneficioso para mi cordura y mi desestresamiento (¿realmente acabo de escribir lo que creo que he escrito? Bueno, tu sigue leyendo, circulen, circulen…). Prometo no hacer más entradas horrorosas que nadie entienda. Agur lectores. ¡Sed buenos!